16 de febrero de 2011

yaran

Esta es una larga reseña de nuestros hermanos Yarán, escrita por un bahá'í que hasta ahora ha mantenido comunicación con Fariba, una de las dos mujeres que desde hace unos meses han sido trasladados a la carcel de Rajaei Shahr, considerada la de más duras condiciones en Irán, donde se apiñan más de 5000 criminales de los más peligrosos, y cuyas condiciones no se pueden narrar, baste mencionar que no tienen baño, carecen de alimentos básicos, y abundan la suciedad y enfermedades de todo tipo. En medio de todo esto se encuentran nuestros queridos hermanos, brindando el más puro amor y consuelo a los más pobres, frágiles y necesitados de entre los prisioneros, sin mirar el mal en ellos, sino encontrando y fomentando la dignidad de los mismos, por tales actos de bondad  han ganado los corazones y el respeto de todos los presos, los llamados "criminales", a pesar de sus condiciones moribundas y de toda clase de peligros para sus propias vidas.


Relato por Farzam Kamalabadi: (traducción de cortesía)

Con el transcurrir de los meses, tanto los familiares de los presos como los guardias de la cárcel han relatado la manera en que milagrosamente peligrosos asesinos peligrosos y delincuentes han sido abrumadoramente  transformados por las almas vivificantes de nuestras dos queridas hermanas, Farida y Mahvash, a quienes ellos han llegado a llamar santas. No menos sorprendente es que durante tres años de prisión, en las raras ocasiones que pudimos hablar por teléfono, nunca se ha escuchado que la voz de Fariba
temblara, excepto para la alegría, con fe plena, completo optimismo, y júbilo total, como si estuviera caminando en las alturas del Paraíso.

En cierta ocasión, Farida se refirió al milagro de cómo la más temible líder de la mafia de la prisión, a pesar de su enorme estatura, la cara rota y con cortaduras y otras temibles características, evitada por todos los otros asesinos y delincuentes, había sido tan movida por nuestras heroínas espirituales que cuando en una ocasión Fariba tuvo que pasar a un baño de barro que se había convertido en lodo acuoso después de la lluvia, llevando sus zapatillas habituales prisión, escuchó que esta mujer le decía a la distancia: "Espere, espere, que tus santos pies no sean tocados y manchados por esta suciedad, entonces, arrojando sus propias zapatillas insistió para que Fariba pase pisando sus zapatillas para no ensuciarse .

Estas son cosas que no suelen suceder en cualquier mortal prisión penal en cualquier parte del mundo, especialmente en un lugar como Rajaes Shahar, donde a menudo asesinos matan a una persona más desgraciada e indefensa al azar, días antes de su ejecución.

En una ocasión Fariba estaba muy emocionada al contar cómo una de sus

compañeras de prisión, donde algunos habían muerto por la gripe porcina y tratados sin piedad por las autoridades de la prisión, llegó en una primera instancia a abandonar completamente las drogas fuertes, sólo para reemplazarlas con la adicción a los cigarrillos, entonces, por el cuidado amoroso de nuestras dos queridas bahá'ís, día a día ella había ido reduciendo la cantidad hasta llegar a fumar un cigarrillo por día.
Fariba relató que ese día, estaba tan contenta que abrazó a la mujer y en vez de pedirle que abandone aquel cigarrilo, le dijo suavemente que la amaba y estaba orgullosa de ella, quién a pesar de sus años de mala suerte en la vida convirtiéndose en una criminal, había obtenido la fuerza de voluntad y suprema determinación de lograr algo que para muchos en el mundo libre habían fracasado en alcanzar, a pesar de todas las facilidades y apoyo. Fariba contó que la señora, ahora una amiga cercana, inmediatamente tiró al suelo el cigarrillo, lo aplastó con los talones, y dando voces dijo: "Hoy finalmente renuncio a esta adicción en aras del amor de ustedes, así como siento y sé que algún día las voy a visitar en sus casas y les diré y mostraré el efecto del amor transformador, el cual ha tenido su efecto en mí, y otros muchos compañeros de prisión!"


Ahora se ha informado que mañana, nuestras dos más preciadas y angelicales damas, y el orgullo supremo de la civilización humana, próximamente serán trasladadas a la peor sección de la cárcel, titulada "El sub-suelo Dungeon para los peores villanos y criminales"

Por un acto sin paralelos, nuestros queridos Yarán serán llevados al exilio dentro de la misma prisión,quienes que por su fe y su amor más puro e incondicional, cuyas acciones de cuidado incansable y desinteresado, han transformado la prisión infernal en un paraíso moral y espiritual, cambiando las almas, transformando los corazones, educando las mentes y rectificando las conductas de los peores criminales, asesinos y drogadictos a tal grado que muchos abandonaron su grave adicción a las drogas simplemente por su propia voluntad y por el estímulo natural que con tanto amor han recibido y no por persuasión y sin necesidad de apelar a la medicina, o la fuerza, así como también, una gran mayoría de prisioneros llegaron a arrepentirse y lavarse las manos y los corazones de todos sus delitos, exclusivamente a través del poder del verdadero amor y por la intensa persuasión natural y libre de la mente y la transformación de sus corazones, afectados sólo por la dinámica del ejemplo.

A pesar de los anuncios por altavoz y severas advertencias para todos los presos a  mantenerse alejados, y no asociarse con los presos Baha'is, grupos de damas se reunieron alrededor de su celda durante estos últimos tres días, con los ojos llenos de lágrimas y por medio de cálidos abrazos, brindando su apoyo moral y expresiones de amor recíproco y espontáneo, como un signo de lealtad unificada de todos los presos por las dos santas damas, a quienes han llegado a conocer como ángeles del cielo estacionados en este infierno humano de un régimen fanático y notoriamente represivo inhumano y oscuro régimen.
Incluso en los opresores, los bahá'ís ven la luz y aplican la transformación y el poder curativo de la revelación de Baha'ullah, que es el Más Grande Elixir, para en última instancia, aplicar la panacea para unificar el cuerpo enfermo del mundo de la humanidad y finalmente, conducir a la transformación evolutiva de la Voluntad de Dios a la totalidad de la humanidad.

"Asimismo, como dádiva de Su presencia, Dios ha abolido el concepto de "impureza" por el cual diversas cosas y pueblos han sido considerados impuros. Él es ciertamente, Quien siempre perdona, el Más Generoso. En verdad, todas las cosas fueron sumergidas en el mar de la purificación en ese primer día de Ridván, cuando derramamos sobre toda la creación los esplendores de Nuestros excelentísimos Nombres y Nuestros exaltadísimos Atributos. Esto es, verdaderamente, una muestra de Mi amorosa providencia, que ha rodeado a todos los mundos. Asociáos, pues, con los seguidores de todas las religiones y proclamad la Causa de vuestro Señor, el Más compasivo; ésta es la corona misma de las obras, si sóis de los que entienden"
Baha'u'llah; Kitáb-I-Aqdas #75


Hace pocas horas, hablando por teléfono, Fariba en el tono más feliz de voz, me dijo que uno de los milagros de la Manifestación Suprema de Dios, Bahá'u'lláh, es el grado en que Él da a sus amados los sufrimientos en rescate de la salud mental, moral y espiritual, la educación y la elevación de la humanidad, en esta era oscura de transición a la madurez colectiva de toda la raza humana, y en un grado mayor, Él también les confiere la verdadera felicidad y júbilo a ellos, y ella es verdaderamente feliz porque irá al calabozo subterráneo, sin temor, ni un poco de preocupación, ante el inminente interrogatorio y las torturas.

Esto me recordó vívidamente una carta suya escrita a mano que me envió unos treinta años atrás, entre 1982 y 1983, enviada de Babolsar a Boston, cuando nuestros amados
mártires habían ascendido al Reino de Abha, y en la que expresaba como ella deseaba ser como el ejemplo de la raíz de la Causa de Dios, el Divino árbol que no es ni de Oriente ni de Occidente, cuyas raíces están firmes en la tierra (oscura, fría, húmeda, tierra humilde como ella describe), por lo que sus ramas y frutos, nosotros, los bahá'ís y todos los hombres de buena voluntad en el mundo exterior, podamos eclipsar y beneficiar a la humanidad entera.
Sin dudas que el Divino árbol está creciendo para eclipsar a toda la raza humana, ahora que las raíces están yendo hacia lo profundo de la oscuridad del alma humana con el fin de llevar y aplicar en todo el mundo el remedio curativo de Bahá'u'lláh.

¡Qué drama sublime en la historia de la humanidad!
Quedo sin palabras, con asombro y admiración.


Ya Bahá'u'l - Abha!

(Oh, Tú, gloria del Más Glorioso!)

Farzam Kamalabadi

Recibido de Daryoush Yaldaii por correo electrónico, 16 de febrero de 2011