City Heights de San Diego, Ca.

El 28 de abril de 2007 nuestra agrupación lanzó su campaña de enseñanza en la Colonia City Heights, San Diego. Estábamos en nuestro cuarto ciclo de crecimiento y después de analizar nuestros recursos, habiendo exitosamente hecho visitas a las casas de nuestros amigos, familias y vecinos y co-trabajadores, nos dimos cuenta que ya era tiempo de extendernos y alcanzar a una población receptiva. ¿Cómo la escogimos? ¡Todos son tan receptivos en nuestra agrupación! Escogimos una colonia que tenía los equipos de enseñanza más fuertes alrededor que podían proveer un grupo fuerte de recursos humanos. En adición a eso, habíamos lanzado un grupo de pre-jóvenes dos semanas antes de nuestra reunión de reflexión y habíamos tenido una respuesta sobrecogedora de los pre-jóvenes de City Heights.

Queríamos integrar las cuatro actividades principales – entonces decidimos lanzar clases de niños en la colonia para que los hermanos menos de los pre-jóvenes pudieron tener a dónde ir también. Naturalmente les podíamos invitar entonces a los papás al Libro 1 y a las reuniones devocionales. ¡Estábamos emocionados! Como resultó, la colonia de City Heights es la agrupación más diversa en la región, con más de 35 idiomas que se hablan.




Ahora era tiempo de ir a sus casas e invitarles a las clases de niños y grupos de pre-jóvenes que estábamos ofreciendo. Después de oraciones ardientes y reuniones devocionales salieron diez equipos de dos personas cada uno a las casas ubicadas en las seis cuadras que rodean el parque, ¡y qué experiencia era! No teníamos idea de lo caluroso de la bienvenida. “Esto es lo que nos ha hecho falta en nuestra comunidad!” dijo una señora. “Yo ni tenía tiempo para salir de mi casa – Dios les mandó directamente a mi puerta.” “Gracias por venir a mi casa”, dijo otro hombre. Se llenaban de lágrimas los ojos de otra señora mientra escuchaba las palabras hermosas de Bahá´u´lláh. Parecía que cada vez que pronunciaban de memoria las palabras de Bahá´u´lláh los maestros – los buscadores decía una y otra vez, “¿Qué dijiste? ¿Podrías repetir eso otra vez, por favor?”. Y cuando lo hacíamos, fueron profundamente conmovidos.

Las historias de enseñanza que emergían de estas visitas a los hogares nos siguen asombrando más alla de nuestras más altas esperanzas. Los maestros experimentaban que cada vez que presentaban la Fe usando la presentación de Ana, los buscadores fueron absolutamente cautivados. No sólo no hacían preguntas o no interrumpían sino si se les preguntaban para ver si tenían preguntas, solo decían, “Yo no tengo preguntas, por favor continúen.” Un buscador quería preguntar algo y luego se castigó a si mismo, diciendo, “Lo siento, no quise interrumpir -- ¡no me dejen interrumpir! Por favor, sigan.”




En una casa cuando los niños oyeron de las clases ¡se pusieron tan emocionados! Se sorprendieron los bahá´ís al ver lo emocionado que estaba. Entonces dijeron otra vez que estas clases se trataban de educación espiritual inspiradas en la Fe Bahá´í y el niño asiático brincaba de alegría y dijo, “Yo quiero aprender acerca de Dios!” Su mamá entonces dijo que desde cuando él había querido ir a la iglesia.

Otros niños durante las visitas hogareñas empezaron a colorear los dibujos del Libro 3 y durante la conversación regresaban a la puerta y con sonrisas en sus rostros ¡pedían más hojas para colorear!

Algunos de los niños habían preparado pequeños regalos para algunos de los equipos de visitadores de hogares. Ellos habían coloreado la hoja y la habían colocado en un sobre y dibujado muchos corazones en el exterior ¡y eso se lo dieron a los maestros!

Y entonces los niños vinieron a las clases. En nuestro primer fin de semana tuvimos una clase con dos niños. ¡El segundo tuvimos dos clases con 25 niños más! Y el tercero, tuvimos tres clases con 30 niños más!, 55 en total! Empezamos tres reuniones devocionales con buscadores igual que dos clases del Libro 1 en español – uno de los cuales está en la casa de una de las señoras a quienes visitamos. ¡Los niños cautivaron nuestros corazones! “¿Van a regresar mañana a enseñarnos? ¿Pueden venir a mi casa, por favor? Por favor, no nos dejen.” decían sus pequeños voces. No lo haremos. Estos niños son de Bahá´u´lláh.




Nuestro plan de tener un equipo de cuatro para cada clase. Dos maestros con dos dos ayudantes que ayudarán en enseñar a los niños al igual que hablar con los miembros de la familia que estén presentes. De esta manera esperamos aumentar los recursos para que quienes estén ayudando lleguen a entrenarse para nuevas clases de niños. Mientras los miembros de los equipos de enseñanza estarán involucrados en el proyecto para hacer las prácticas del Libro 2 y 6. De esta manera sostendremos nuestros esfuerzos y multiplicaremos nuestras actividades principales.

En total tenemos como unos 35 bahá´ís involucrados en este proyecto. Ellos están encargados de clases de niños y sus ayudantes, animadores de grupos pre-juveniles, equipos de salen para visitas hogareñas, tutores de los círculos de estudio y anfitriones de las reuniones devocionales. Además están los que juegan con los niños, les llevan algo para tomar, cobijas, hablan con los papás y oran constantemente para la ayuda divina.

¡Estamos conquistando nuestra agrupación una colonia a la vez y hemos empezado con City Heights!

Artículo de Breath of the Spirit, revista de los bahá'ís de San Diego, junio, 2007.